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Tanto la comunidad científica como los miles de testimonios por todo el mundo reconocen la Ayahuasca en un contexto terapéutico para tratamiento de adiciones y depresión, de aquí se abren otros tratamientos, los trabajos con el miedo, la angustia, ansiedad, inseguridad y muchas más… A esto lo denominamos el trabajo con las “limitaciones”, los personajes, las máscaras y el lugar desde donde hacemos las cosas.

La gran mayoría de las personas (Persona en Griego significa- Per- Sona: Per significa máscara y Sona se refiere a sonido) sonido detrás de la máscara) vienen por asuntos de malestar general y por el sufrimiento de sucesos pasados. Es tal la identificación de ese sufrir que tienen la creencia que es su culpa y merecen el castigo del sufrimiento (Esto es un condicionamiento y programa, es absolutamente falso)
Trabajar con las limitaciones está bien, es un mal necesario y un trabajo puramente terapéutico, qué, tras estados expandidos de consciencia y la apertura de corazón que ofrece la Ayahuasca, la persona, a través del terapeuta (Integrador) puede llegar en mayor profundidad a esas heridas, esos traumas inconclusos que atormentan el presente. Si bien es cierto que para transcender un trauma lo primero es hacerlo consciente, reconociendo y aceptando, posteriormente lo podemos dejar ir… Yo lo veo así, lo veo, lo observo, lo acepto porque además no puedo hacer nada para cambiarlo y después lo dejo ir… Esto parece fácil según lo digo, pero realmente es un trabajo interno muy profundo.

Como he dicho anteriormente, a esto lo denominamos el trabajo con las limitaciones.

Cuando uno ha hecho un trabajo y un reconocimiento con sus limitaciones, denunciándolas y exponiéndolas podemos ir un poco más allá, ahora nos encaminamos hacia la otra polaridad de una misma energía, nos enfocamos en la “POTENCIALIDAD”

Cuando hablo de la potencialidad se me quedan cortas LAS PALABRAS, es muy difícil describir las bondades y talentos que te ofrece el reencuentro con tu SER. La ayahuasca es la llave, pero el poder es de cada uno de nosotros, es cómo acceder a una información ancestral dentro de ti… Esto es misterio, magia, es extraterrestre, la verdad es que no tengo ni idea, pero tengo la certeza de que simplemente es.
Tengo muchas experiencias que compartir, pero esta fue la que abrió la caja de pandora para las limitaciones.

Fue un retiro en Roma, una ceremonia que dirigían 2 colombianos, unos músicos de alto nivel con mucha experiencia con las medicinas, la viva imagen de la potencialidad y los talentos humanos… Después de la segunda toma (el refuerzo) tuve la compresión, algo se abrió, un escalofrío cargado de éxtasis recorrió mi espalda recordándome quién y qué era… Los facilitadores cantaban y tocaban canciones que no conocía, no sabía las letras y aún así las cantaba con ellos con precisión y armonía, el tambor me tocaba a mí y atendía con ritmos perfectos las melodías de las guitarras y flautas mientras se me saltaban las lágrimas de los ojos conectándome con idiomas de pueblos indígenas, era muy fuerte lo que paso ahí, podía leer el sentir de todos, una especie de telepatía, la comunión con el todo es indescriptible. El acceso a la información y el potencial a través de estados expandidos de consciencia es inconmensurable… Algo difícil de digerir para la razón y la lógica, la intelectualidad desaparece cuando hace presencia tú SER Y SU PODER…
Como es sabido y en muchos libros así se relata, cientos de artistas, músicos, escultores, pintores, compositores y creadores de cualquier disciplina son conocedores de la potencialidad enteogénica, de conectar con esa “POTENCIALIDAD HUMANA” que todos tenemos…
Cada vez son más personas que están conectando con su potencialidad, ese es un foco relevante para la continuidad del florecimiento del SER.
¿TE ATREVES A CONOCER TU PODER?
Texto: Ulan Romero.